ad¿Quién dijo que el sexo es exclusivo de los jóvenes? En More celebramos la sexualidad en todas las etapas, y hoy, nos centramos en el intrigante y a veces malinterpretado tema del sexo en la tercera edad.
Para empezar, la sexualidad no tiene fecha de caducidad. Con los años, es cierto que nuestros cuerpos y deseos pueden cambiar, pero eso no significa que el sexo deje de ser parte importante de nuestras vidas. Al contrario, con la edad viene la sabiduría, y también una mayor comprensión de lo que nos brinda placer y satisfacción.
La tercera edad puede ser una etapa de reinvención y descubrimiento sexual. Las preocupaciones por el embarazo ya no están en la mesa, y eso puede liberar a las parejas para explorar nuevas formas de intimidad. Es importante recordar que el sexo no es solo un acto físico, sino también una forma de conectar emocionalmente.
Sin embargo, es esencial mantener una mentalidad de seguridad. Las ITS no distingue edades, así que el uso de protección, como los condones, sigue siendo relevante. La seguridad y el placer deben ir de la mano, sin importar la edad que tengas.
Es posible que con los años surjan algunas dificultades físicas. Aquí es donde entran en juego la paciencia, la comunicación y la adaptación. Y, por supuesto, los juguetes sexuales pueden ser grandes aliados para mantener vivo el deseo y explorar nuevas formas de placer.
El sexo en la tercera edad debería ser motivo de celebración, no de vergüenza. Después de todo, ¿quién dijo que no puedes tener los mejores orgasmos de tu vida después de los 60? El sexo es como un buen vino, puede mejorar con los años si lo cuidamos y lo disfrutamos de manera responsable.
Ya sea que estés en toda tu juventud o disfrutando de los años dorados, recuerda: El placer no tiene edad.
Nos leemos pronto.