El sexo es mucho más que besos, un par de caricias y penetración. Alrededor de él existen varios eventos físicos, hormonales y psicológicos que hacen de este momento una experiencia fuera del planeta, mejor conocido como la Respuesta Sexual Humana.
Mente y cuerpo
Deseo: fase mental que marca el inicio de una relación sexual, como fantasías eróticas, ver a tu crush, un rose o caricia, una escena subida de tono… en general, todo aquello que te mueve el piso o te A esta etapa también se le demonima “estímulo sexual efectivo”.
Excitación: momento que el cerebro envía mensajes que producen ciertos cambios en el cuerpo, que son involuntarios, como: erección de pene o clítoris, lubricación vaginal, cambios en la respiración, entre otros.
Meseta: los cambios de la fase anterior se elevan al máximo para mantenerse así durante un tiempo. La respiración se acelera, el tamaño del pene y de los pechos aumenta, hay mucha más lubricación y comenzarás a sentir contracciones musculares intensas y placenteras.
Orgasmo: luego llegamos a la fase más deseada de todas. Sentirás espasmos de placer, la respiración se acelerará aún más y llegará la eyaculación. En el caso de las personas con vulva, existe la posibilidad de disfrutar más de un orgasmo.
Resolución: momento en el que todo tu cuerpo vuelve a la normalidad. Tendrás una sensación de relajación extrema y en algunos casos, puede dar sueño o hambre.
Periodo refractorio: fase extra que básicamente es el tiempo que les toma a las personas con pene recuperarse para darle con todo a ese segundo round. Este tiempo de recuperación va aumentando con la edad.
Es importante mencionar que estas no son fases automáticas; es decir, solo porque te «pongas en marcha» no tienes por qué llegar al último paso necesariamente. Necesitas llevar un flujo constante de excitación y estimulación para ir pasando de una fase a otra con éxito.
Cerebro
Conocemos de sobra todos los beneficios que tiene el sexo en nuestro cuerpo, disminuye la presión arterial, fortalece el sistema inmunológico, alivia el estrés, quema calorías e incluso te ayuda a dormir mejor… pero, ¿por qué sucede todo esto? Todo esto se debe a que nuestro cuerpo libera muchas hormonas durante el acto sexual que dan como resultado un sinfín de beneficios para nuestra salud.
Dopamina: el sexo hace que el cerebro libere niveles mucho más altos de algunos neuroquímicos y, especialmente, se da relevancia al hecho de que liberamos dopamina, la cual tiene muchas funciones en el cerebro, como: el comportamiento y la cognición, la actividad motora, la motivación y la recompensa, la regulación de la producción de leche, el sueño, el humor, la atención y el aprendizaje.
Oxitocina: hormona que actúa como neurotransmisor en el cerebro, y se fomenta con la excitación sexual y el orgasmo. También podría tener efectos analgésicos, lo que podría ser una razón por la cual el placer sexual y el dolor a menudo están relacionados.
Serotonina: durante el sexo puede generar sentimientos de felicidad y paz, mejorar el estado de ánimo, reducir el estrés y, quizás hasta mejorar la memoria.
Endorfina: luego del sexo, el cuerpo libera endorfina que da como resultado total relajación y que puedas dormir mejor que nunca.